Medición y exposición en fotografía
Fotografías cortesía de KINO, Gord McKenna, Kim Seng, F. Antolín HernándezKarmen A.C. bajo licencia Creative Commons

Exposición Fotográfica: Guía Detallada (Ejemplos Incluidos)

El dominio de la luz es lo que te definirá como fotógrafo y una correcta medición y exposición fotográfica lo que te convertirá en maestro. Por eso, hoy actualizamos este artículo con este tema que nos parece tan importante y que vamos a mejorar para ti según las preguntas que más nos hacéis en el foro y por correo electrónico. Pero antes de seguir, me gustaría recomendarte nuestra guía sobre iluminación en fotografía con toda la información y consejos que puedas necesitar, para que puedas profundizar en el tema siempre que lo desees.

Si la luz en la escena no está correctamente medida, la exposición fotográfica no será la correcta y por lo tanto, la calidad de la fotografía se verá afectada haciendo que todas las técnicas y trucos que hayas aplicado hayan sido en vano.

Antes de aprender cómo medir correctamente la luz, verás porque es tan importante hacerlo: realizar una correcta exposición.

En el artículo de hoy intentaré echar luz sobre algunos temas que suelen asustar a la mayoría de los fotógrafos que se están iniciando en el maravilloso mundo de la fotografía, pero que no pueden dejar de conocer si lo que quieren es lograr excelentes fotografías.

Acomódate, acerca tu cámara y sigue leyendo.

¿Qué es el Rango Dinámico?

Antes de ver cómo se mide la luz de una escena para lograr una correcta exposición, es necesario que entiendas que es el rango dinámico y por qué es tan importante a la hora de lograr una correcta exposición:

El rango dinámico mide la cantidad de tonos claros y oscuros que tu cámara es capaz de capturar en una misma fotografía, es decir, es la capacidad que tiene la cámara para obtener detalles en ambas zonas de una fotografía, las luces y las sombras. El rango dinámico establece la cantidad de matices tonales que tu cámara es capaz de capturar.

Presta atención a la siguiente fotografía. En ella conviven dos situaciones opuestas, una zona muy clara y la otra muy oscura. Este tipo de situaciones son imposibles de resolver por las cámaras digitales por lo que no serán capaces de ofrecerte detalle en ambas zonas al mismo tiempo debido a que su rango dinámico no es lo suficientemente amplio. No tendrás otra alternativa que inclinarte por obtener detalle en una zona o en la otra: detalles en las sombras y luces quemadas o detalle en las luces y sombras muy oscuras.

Rango dinámico en fotografía
Rango dinámico en fotografía

Cuanto mayor sea el rango dinámico de tu cámara más detalles será capaz de capturar y por ende mejor será la calidad de las fotografías finales. Eso sí, siempre y cuando realices una correcta medición y exposición de la escena para aprovechar todo su potencial. No te preocupes, sigue leyendo ¡y aprenderás cómo hacerlo!

Y si tienes curiosidad por conocer el rango dinámico de tu cámara, en esta web puedes verlo.

¿Qué es la exposición en fotografía?

La exposición en fotografía es el proceso mediante el cual la luz llega al material fotosensible, es decir, la película o carrete en la fotografía analógica, y el sensor digital cuando hablamos de cámaras digitales.

Al contrario de lo que pueda parecerte, la exposición no es el tiempo que la fotografía se expone a la luz: el tiempo es solo una de las tres variables controlan la entrada de luz al plano focal (sensor) para lograr una correcta exposición.

¿Qué es el triángulo de exposición? 3 variables que influyen en la exposición en fotografía

Estas tres variables que te acabo de mencionar son las que conforman el triángulo de la luz. Vamos a verlas en detalle.

gráfico sobre el triángulo de exposición de fotografía

1. Sensibilidad ISO

La sensibilidad ISO determina la cantidad de luz que debe captar el sensor. Cuanto más bajo es este valor, menos luz captará. Cuanto más alto, más luz.

En la fotografía analógica para cambiar la sensibilidad ISO hay que cambiar de película, pero en las cámaras digitales, tenemos la suerte de poder ajustarla con un botón.

¿Qué es el ruido en fotografía?

Tal como te comenté en el artículo “24 formas de conseguir fotos super nítidas”, si elevas demasiado la sensibilidad ISO, tus fotografías tendrán mayor ruido, menor nitidez y por lo tanto menor calidad. Utiliza valores ISO altos solo cuando no te quede otra alternativa, es decir, cuando no puedas lograr una correcta exposición compensando la “falta de luz” producto de utilizar un ISO bajo mediante las otras dos variables que vamos a ver ahora: disminuyendo la velocidad de obturación o abriendo el diafragma.

2. Apertura de diafragma

El diafragma es un dispositivo que se encuentra dentro del objetivo de tu cámara y que permite controlar la cantidad de luz que llega al plano focal (sensor), junto con la velocidad de obturación, y al mismo tiempo, regular la profundidad de campo de la fotografía, es decir, que saldrá en foco y que no.

Cuanto más cierres el diafragma (valores f/ más altos, por ejemplo, f/16), mayor profundidad de campo obtendrás en tus fotografías (más planos de la imagen enfocados), pero menos luz llega hasta el sensor, debiendo compensar la falta de esta o aumentando la sensibilidad ISO o bien disminuyendo la velocidad de obturación.

Cuanto más lo abras (con números f/ más bajos como f/1,8), menor será la profundidad de campo (mayor desenfoque o bokeh) y más luz llegará al sensor, pudiendo utilizar valores ISO más bajos y velocidades de obturación más rápidas.

3. Velocidad de obturación

La velocidad de obturación es el tiempo que el obturador permanece abierto permitiendo que la luz llegue hasta el sensor. Cuanto mayor sea la velocidad de obturación (1/1000s), menor será la luz que llegue al sensor y cuanto menor sea la velocidad (1”), mayor será la luz que logre atravesar el obturador. En este vídeo Mario te lo explica muy bien:

Ajustando la velocidad de obturación no solo lograrás fotografías más claras o más oscuras, sino que además podrás transmitir la sensación de movimiento utilizando velocidades muy lentas o bien mediante velocidades muy rápidas, serás capaz de congelar completamente una escena.

Paisaje durante el atardecer
Paisaje durante el atardecer

Como resumen, en este gráfico puedes ver a qué afecta cada uno de estos parámetros con sus efectos principales y secundarios:

Gráfico con los efectos del triángulo de exposición en fotografía

¿Cómo se logra una adecuada exposición fotográfica?

Una excelente herramienta que te ayudará a realizar una correcta exposición de tu fotografía es la llamada “Ley de reciprocidad” que no es más ni menos que una regla con la cual obtendrás una misma exposición (fotografía) con distintas combinaciones de velocidad, apertura y sensibilidad ISO. No, no entres en pánico aún! Aquí te la explico:

Ley de Reciprocidad: las 3 variables para lograr una correcta exposición no tienen una combinación única, sino que puedes ajustar cada una de estas de modo diferente y lograr exactamente la misma exposición.

Observa la siguiente imagen: en la misma podrás ver distintas combinaciones de apertura de diafragma y velocidad de obturación que darán como resultado una misma exposición, es decir, la misma fotografía ni más ni menos expuesta, igual.

Cómo Equilibrar las Variables de Exposición
Cómo Equilibrar las Variables de Exposición

Una forma muy sencilla de obtener la misma exposición con distintas combinaciones de ISO, velocidad y diafragma es haciendo “dobles y mitades”. ¿Qué quiere decir esto? Es muy sencillo presta atención:

Si dejas la apertura del diafragma fija, puedes obtener una misma exposición modificando tanto la sensibilidad ISO y la velocidad de obturación de la siguiente manera:

ISOVelocidad
1001/50s
2001/100s
4001/200s
8001/400s
16001/800s
32001/1600s
64001/3200s

La exposición en todos los casos será la misma: si duplicas la sensibilidad ISO, para lograr la misma exposición podrás aumentar la velocidad al doble y aún conservar la misma exposición en tu fotografía.

Lo mismo ocurre si fijas la sensibilidad ISO y modificas la velocidad y la abertura del diafragma:

f/Velocidad
1.81/3200s
2.81/1600s
41/800s
5.61/400s
81/200s
111/100s
161/50s

En todas las combinaciones obtendrás, nuevamente, la misma exposición. Fíjate que esta vez la relación entre ambas es inversa: al cerrar el diafragma deberás de disminuir la velocidad con el fin de compensar la entrada de luz al sensor.

La última relación que queda por ver es fijando la velocidad de obturación, obtener la misma exposición modificando la sensibilidad ISO y la abertura del diafragma, para obtener la misma fotografía final.

f/Velocidad
1.8100
2.8200
4400
5.6800
81600
113200
166400

La ley de reciprocidad es extremadamente útil, con ella podrás ajustar los parámetros de la toma a realizar de una manera más consciente y controlada sacándole el máximo provecho al poder de tu cámara.

Ahora veamos una misma escena tomada con distintos parámetros pero que presenta una misma exposición (independientemente de que sea o no correcta).

La clave para que puedas entender a la perfección cómo funciona es tomando tu cámara y haciendo tú mismo las pruebas con cualquier objeto que tengas a mano. Toma cualquiera de los ejemplos que te comenté anteriormente y ponte a sacar fotos.

¿Cuándo una fotografía está correctamente expuesta?

Una fotografía está correctamente expuesta cuando el sensor es capaz de capturar la mayor cantidad de información (luz) y tonos (rango dinámico) que su capacidad le permite. Imagínate que tienes una cámara capaz de tomar fotos en una resolución de 18 megapixeles, pero tú disparas solo en 8: estarías desperdiciando el potencial de tu cámara para trabajar con mejores resoluciones.

Lo mismo ocurre con la luz, si tu cámara es capaz de capturar mucha más luz de la que tú, ajustando las 3 variables de la exposición le permites, estarás desperdiciando muchísima información que el sensor es capaz de capturar, pero que tú estas dejando afuera.

3 Exposiciones
3 Exposiciones

La fotografía del medio está correctamente expuesta, quizás no sea el resultado final que quieres para la misma, pero se logró aprovechar casi la totalidad de la capacidad del sensor para registrar luz, es decir, se aprovechó al máximo su rango dinámico. Una vez hayas logrado una correcta exposición, podrás editarla* en el ordenador sin perder calidad.

Si sobre o subexpones tus fotografías, estarás sacrificando muchísima información valiosa, que no podrás recuperar luego mediante la edición, por lo que si una vez en el ordenador quieres “aclarar” o “oscurecer” las fotografías, les restarás mucha calidad ya que el ordenador tendrá que “inventar” información donde no la hay.

*con editar me refiero solo a ajustar ciertos parámetros como la exposición, la luminancia y las sombras en el ordenador a diferencia del retoque en donde se modifica directamente la escena alterando la misma.

Fotografía de una fotografía
Toma de una fotografía en la que se comprueba el histograma

Lograr una correcta exposición te será más fácil si aprovechas las siguientes herramientas que tienes al alcance de tus dedos (en tu cámara):

Exposímetro

Es el encargado de medir la “cantidad de luz” necesaria para que una fotografía salga expuesta de manera correcta. Una vez recibe la luz reflejada por todos los elementos de la escena, calcula un valor promedio de los todos los tonos, claros y oscuros, y ajusta los valores de velocidad, apertura y sensibilidad ISO para poder obtener una fotografía correctamente expuesta (esto no es tan así pero lo entenderás luego).

Exposímetro

En los modos automáticos o semi automáticos resulta fundamental ya que es la cámara quien decide cuales son los parámetros de exposición correctos para cada toma, en cambio si disparas en modo manual, podrás utilizarlo para medir la luz de la escena y ajustar estos parámetros tú mismo.

Su uso es muy sencillo: mediante el signo “+” o “-“ te indicará si la escena se encuentra sobre o subexpuesta respectivamente. Es decir, si la señal que hay en el exposímetro que ves recuadrado en línea roja discontinua está bajo el 0, lo normal es que tu foto esté correctamente expuesta, aunque no es exactamente así, más abajo en el apartado sobre cómo medir la luz en fotografía, veremos esto más en detalle. Si se inclina hacia los valores positivos (izquierda o derecha según la cámara) normalmente indicará que la foto está sobreexpuesta. Mientras que si se desvía hacia los valores negativos, lo más probable es que te esté indicando una subexposición.

Si no quieres modificar los parámetros que has ajustado, y no estás usando el modo manual, puedes recurrir a la compensación de la exposición.

¿Qué es la compensación de la exposición?

En los modos automático y semiautomático de la cámara, puedes decirle a tu cámara que sobreexponga o subexponga los pasos que tú consideres (si no sabes a qué me refiero con pasos, tienes que hacer una pausa para leer esto y poder entender de qué estamos hablando). A veces, en determinadas situaciones, el fotómetro de tu cámara o exposímetro no mide correctamente, o no logras el efecto que deseas. En estos casos, si el modo manual no es la solución por el motivo que sea, puedes recurrir a compensar la exposición (normalmente se accede en las cámaras a través de la opción «+/-«, ante la duda, recurre al manual de tu cámara.

Ahora seguimos con otra herramienta que te ayudará a exponer correctamente.

Histograma

El histograma es un gráfico que muestra cómo están distribuidos todos los tonos de una fotografía, ya sean grises o no (colores RGB: azul, rojo y verde) de acuerdo al rango dinámico que es capaz de captar tu cámara.

En este podrás observar que cantidad de píxeles claros, medios y oscuros hay en tus fotografías, es decir, cómo está expuesta la misma. Una fotografía está correctamente expuesta cuando se aprovecha al máximo la capacidad de su sensor para captar tonos. Esto es cuando no solo no quedan partes fuera del rango que es capaz de captar tu cámara, sino que también cuando el histograma esta lo más “derecheado” posible, es decir, lo más pegado al borde derecho posible (sin llegar a perder información, es decir, a salirse del gráfico por la derecha).

En la era digital de la fotografía, cuantos más tonos claros logres capturar (histograma más orientado a la derecha posible) menor pérdida de calidad sufrirán tus fotografías, incluso tras la edición.

Histograma
Histograma

Consulta el manual de tu cámara para conocer cómo visualizar el histograma una vez tomadas tus fotografías, o bien, si es que tu cámara lo permite, visualizarlo en vivo a través de la pantalla o Live view al momento de realizar tus tomas.

Pasos para una correcta exposición fotográfica

Para una exposición correcta
Para una exposición correcta

Si bien cada cual tiene su método para lograr una correcta exposición fotográfica, es probable que al principio te sientas un poco perdido y no sepas por donde comenzar. Es normal que te sientas un poco abrumado, nadie nació sabiendo. A continuación, te dejo un paso a paso para que puedas utilizarlo como guía hasta que te vuelvas un maestro en ello:

  1. Selecciona el modo de tu cámara en Manual.
  2. En el menú de tu cámara selecciona el área de medición de la luz en puntual.
  3. Ajusta el valor ISO de acuerdo a cómo tu cámara procese el ruido y a tu tolerancia a este.
  4. Ajusta el diafragma o la velocidad de obturación de acuerdo al tipo de fotografía que quieras lograr: dinámica o estática. Si vas a fotografiar un paisaje, ajusta el diafragma para obtener mayor profundidad de campo y que la foto salga lo más nítida y en foco posible.
  5. Para ajustar el valor de exposición que te falte, debes realizar una medición del tono más claro de la escena.
  6. Una vez tomada tu fotografía, échale un vistazo a cómo ha quedado en la pantalla de tu cámara, pero en el modo “histograma”. En este podrás ver cómo han quedado los todos claros y oscuros distribuidos en tu fotografía.

¿Por qué no utilizar los modos predefinidos por tu cámara?

Todas las cámaras de fotos vienen equipadas con lo que se conoce como “fotómetro”, que es el encargado de “medir la cantidad de luz” en las escenas que vas a fotografiar. Este fotómetro capta la luz que es reflejada por los objetos hacia la cámara y mide su intensidad de modo de ajustar automáticamente la exposición para la toma, si utilizas los modos predefinidos.

El problema comienza aquí, dicho fotómetro está calibrado para capturar la luz de una escena como si todos los objetos de esta fueran “GRIS MEDIO”. El gris medio en fotografía es algo así como un promedio entre los tonos claros y oscuros que pueden presentarse en una escena.

Más allá de que el exposímetro de tu cámara te indique que la exposición fotográfica es la correcta puede que, en situaciones muy claras o muy oscuras, te indique que la fotografía este sobre o subexpuesta cuando en realidad no lo está. Esto es a lo que me refería cuando comentaba la compensación de la exposición más arriba.

Otro problema aún mayor que el anterior es que, el fotómetro de tu cámara al tomar todos los colores como gris neutro, tiende a centrar la posición del histograma, desperdiciando así mucha información y no utilizando el máximo potencial de tu cámara.

Intenta fotografiar una hoja blanca en un modo automático o semiautomático y veras que esta sale más bien gris en vez de blanca. Esto solo podrás corregirlo, o bien con el procesado, pero le bajaras la calidad a la imagen, o bien realizando una correcta exposición en modo manual.

El Gris Medio
El Gris Medio
Modos Prioridad de Apertura y Manual

Las líneas punteadas de la imagen anterior marcan en el histograma la capacidad del sensor (rango dinámico) que ha sido desaprovechada por no realizar una exposición que optimice toda la capacidad de este para captar tonos en una escena.

De todos modos, si cuentas con una cámara compacta digital donde puedes visualizar en la pantalla como quedará exactamente la fotografía antes de realizar la toma, la diferencia entre las mediciones de los modos automáticos y la que puedas llegar a realizar tú en el modo manual serán muy similares. Solo en ciertos casos, lograrás mejorar la medición que realiza la cámara tú mismo. De hecho, en muchas cámaras de este tipo, no es posible ajustar los parámetros de exposición manualmente.

Primero medir, luego exponer

La clave para lograr una correcta exposición fotográfica es, realizar una buena medición de la cantidad de luz en la escena. Y, una vez hecho esto, exponer para los tonos más claros. ¿Qué quiere decir esto? Sigue leyendo y lo entenderás.

Medición de la luz en fotografía

Veamos ahora qué es medición en fotografía. Como su propio nombre indica, el proceso para medir la “cantidad de luz” que tiene una determinada escena con el fin de lograr una correcta exposición, es decir que no quede sobreexpuesta (quemada) o subexpuesta (oscura).

Esto quiere decir que, siempre que vayas a tomar una fotografía, debes medir la cantidad de luz que es reflejada por los objetos para poder ajustar los parámetros en pro de una correcta exposición: apertura del diafragma, velocidad de obturación y sensibilidad ISO y lograr así, aprovechar al máximo el rango dinámico de tu cámara y maximizar el potencial de esta para captar información.

No ajustar correctamente los parámetros significará tener que forzar posteriormente en el procesado con una consecuente pérdida de calidad o incluso una irreparable pérdida de datos:

  • Si tu foto ha quedado subexpuesta, cuando en el ordenador intentes “aclararla” generarás ruido, bajando la calidad de la imagen. En el histograma verás que hay una gran proporción de información que ha quedado fuera de lo que tu cámara es capaz de capturar (su rango dinámico). Hay una gran porción de datos que ha quedado fuera de la exposición, perdiendo detalles en los tonos oscuros.
Para las fotos subexpuestas
  • Si tu foto te ha quedado sobreexpuesta, es decir, que has perdido detalle en los tonos más claros, e intentas corregirla en el post procesado, el ordenador tendrá que inventar información donde no la hay, ya que los píxeles, quedaron totalmente blancos, perdiendo nuevamente calidad. El histograma queda más orientado hacia la derecha y una gran proporción de datos que tu cámara hubiera podido aprovechar, quedan fuera de la exposición. Esto es conocido como “área quemada”, es decir, sin detalle en los blancos.
Para las fotos sobrexpuestas

¿Cómo medir la luz en fotografía?

Te presentamos dos formas de medir la luz en fotografía:

Cómo se mide la luz
  1. Con el exposímetro de la cámara: es el método más común y utilizado por la mayoría de los fotógrafos sean conscientes de ello o no. Aunque no lo notes el fotómetro de tu cámara está constantemente calculando la cantidad de luz de la escena que es reflejada hacia el sensor con el fin de proporcionarte información para que puedas ajustar la exposición de la toma o bien para ajustarla automáticamente si es que disparas en modos automáticos o semi automáticos. Recuerda que el exposímetro de tu cámara está calibrado para un “gris neutro” por lo que no te brindará la mejor exposición posible en una toma. Y según el objeto que sea (más claro o más oscuro, más liso o más brillante) reflejará la misma luz de distinta forma. Por eso no podemos decir que poner el exposímetro a 0 garantiza siempre una correcta exposición.
  2. Con un fotómetro de mano (incidente o reflejada): los fotómetros de mano son utilizados por los fotógrafos profesionales, en su mayoría, para medir tanto la luz que incide en un determinado objeto (que le llega) como así también la que este refleja hacia la cámara. Trabajar con ellos supone mayor tiempo disponible para planear la escena, medir las luces de toda la escena y promediar las mediciones más claras y más oscuras para obtener una exposición correcta en ambos tonos.
Fotómetro
Fotómetro

Modos de medición de la luz

Como ya te habrás dado cuenta, la mejor forma de aprovechar todo el potencial que tienes en tus manos (tu cámara) y en tus ojos (tú mismo) es medir la luz en tus fotografías tú mismo. Pues independientemente de la calidad de tu cámara, todas tienen el mismo problema al utilizar los modos automáticos.

Por suerte, tu cámara trae distintos modos para realizar la medición de luz en una escena. Mario publicó el artículo “Ejemplos de modos de medición de luz en fotografía” donde explica cómo y cuándo utilizar cada uno de estos modos, te recomiendo que antes de salir a practicar le eches un vistazo. De todas formas, a modo de resumen, te explico brevemente cada uno de los modos de medición de luz en fotografía.

Medición matricial o evaluativa

Mide la luz de toda la escena en su conjunto e intenta lograr una exposición media de esta, obviando las altas luces y las sombras. Es el mejor modo para empezar, pues simplifica mucho la tarea y es válido para la mayoría de situaciones, al menos para lograr una exposición fotográfica correcta (aunque no siempre óptima). Si estás empezando, no te compliques, usa este modo, poco a poco, con la práctica, irás afinando.

Medición parcial o ponderada

Funciona de la misma manera que la matricial, pero en este caso prioriza la medición de la luz en la zona central de la fotografía.

Medición puntual

Este es el modo que más te recomiendo utilizar una vez que lo controles. Con él, tú eliges, con el punto de enfoque, exactamente dónde quieres que mida. En el punto exacto, y tomará como medida ese punto, aunque exista mucha diferencia con otra parte de la escena.

¿Cómo medir correctamente la luz en fotografía?

Como te dije anteriormente, hay muchas situaciones en las que el fotómetro de tu cámara te indicará que la fotografía está correctamente expuesta cuando en realidad no lo está (por ejemplo, en la nieve).

La clave para realizar una buena medición es “exponer para los tonos más claros”. Es decir, medir la cantidad de luz de la zona más clara en la escena a fotografiar y ajustar los valores de exposición para que esa zona salga lo más clara posible (más a la derecha del histograma sin salirse). Si el tono más claro de la escena no se sobreexpone, es decir, no queda quemado, te aseguras que todos los tonos más oscuros que este quedan con detalle, aprovechando al máximo el rango dinámico.

Te estarás preguntando: ¿Cómo lo hago si no puedo confiar en el exposímetro de la cámara? Es cierto que no puedes confiar siempre en el indicador de exposición de tu cámara ya que, como vimos anteriormente, no aprovecha al máximo la capacidad de tu sensor y puede que te indique que hay sobre o subexposición cuando en realidad no la hay.

Límite de sobreexposición de tu cámara

Lo que debes de conocer es el límite de sobreexposición de tu cámara. Para ello, realiza varias pruebas fotografiando objetos muy claros. El objetivo es conocer hasta dónde tu cámara es capaz de captar detalle en los tonos más claros. No importa que tu cámara te indique que la fotografía quedará sobreexpuesta, cuando observes el histograma verás que no ha quedado área fuera del gráfico. Una vez que conozcas hasta dónde eres capaz de sobreexponer sin perder detalle, estarás listo para realizar las mediciones en tus fotografías.

Puedes valerte tanto del histograma, como así también del modo “zonas destacadas” al momento de revisar la fotografía. Este modo te mostrará tu foto en la pantalla de tu cámara y te indicará que áreas han quedado “quemadas” mediante un parpadeo. Intenta minimizar estas zonas.

Pasos para medir correctamente la luz en una fotografía

  1. Ajusta tu cámara en modo de disparo manual.
  2. Configura el modo de medición de la luz en el modo “puntual”.
  3. Busca el tono más claro en toda la escena que te dispones a fotografiar.
  4. Realiza la medición de tu fotografía en ese punto.
  5. Configura los parámetros de la exposición de acuerdo a cuál es la estética que quieres darle a tu fotografía. Hazlo intentando mantener la sensibilidad ISO en el valor lo más bajo posible de modo de no perder calidad producto del ruido.
  6. Realiza el disparo y captura la foto.
Zonas de exposición

La medición se ha realizado de modo puntal en las franjas blancas de la camiseta del pequeño niño (1).

De esta manera habrás logrado mantener al máximo el nivel de información en cada una de tus fotografías. Si aún no estas conforme con el resultado, puedes compensar la exposición in situ. También puedes hacerlo a posteriori, en el procesado, oscurecerla hasta obtener la fotografía deseada, pero en este caso con la consecuente pérdida de calidad.

Otro ejemplo en el que te tocará compensar la exposición, es a la hora de fotografiar un paisaje nevado. Si lo fotografías con el exposímetro a 0, puesto que la nieve refleja muchísima cantidad de luz, tu cámara tenderá a subexponer y obtendrás una fotografía oscura, con la nieve gris. Por eso se suele recomendar sobreexponer dos pasos.

Practicar

El artículo de hoy puede parecerte más complicado de lo que realmente es. La clave para poder entenderlo bien es tener tu cámara a mano e ir realizando las pruebas tú mismo. La paciencia, junto con la práctica serán tus mejores aliadas a la hora de lograr una correcta exposición fotográfica de tu fotografía.

¡Espero que te haya gustado el artículo de hoy! Por favor, practica lo arriba descrito, haz fotos, muchas fotos, prueba-error. Como siempre, recuerda recomendar el artículo en tus redes sociales favoritas y, si tienes alguna pregunta, no dudes en compartirla en los comentarios.