Intenta transmitir algo de su personalidad
Fotografías cortesía de: Simon Flécher, Emilio Küffer, David Cornejo, Timothy Dang, Francisco Manuel Esteban, Benny W., Leo Hidalgo, Taoling Yang bajo licencia Creative Commons.

Domina la Fotografía de Retratos Nocturnos Con Estos Sencillos Trucos

Si te gusta la fotografía, que entiendo que sí porque estás leyendo esto, estoy segura de que has tenido más de una vez (y más de dos) que fotografiar a una persona por la noche. Son muchos los eventos o las reuniones entre familia y/o amigos que se celebran por la noche y que uno desea inmortalizar (o que lo retraten en estas ocasiones para la posteridad). Pero claro, es de noche, no hay luz, el flash de la cámara provoca un efecto nada favorecedor… El caso es que los retratos que realizas por la noche no terminan de convencerte en absoluto y no sabes muy bien cómo solucionarlo, y eso que puede que hasta te hayas leído nuestra guía Dominando la Fotografía de Retrato. Si este es tu caso, estás en el lugar adecuado pues en este artículo voy a tratar de darte algunos consejos y trucos para que mejores este tipo de fotografías. Algunos consejos puede que ya los conozcas porque son generales, pero no por ello podemos olvidarlos, así que nunca viene bien un recuerdito, y si no los habías escuchado o leído antes… ¡pues este es el momento! Voy a comenzar por los más generales y básicos para más adelante en el artículo centrarnos en aquellos consejos que son específicos para los retratos nocturnos. ¿Me acompañas?

1. Enfoca a los ojos

Esto es básico en un retrato y por mucho que lo sepas no podemos obviarlo porque si te olvidas de este punto casi con toda seguridad que arruinas el resultado. Salvo que lo que desees sea otro efecto creativo, claro está (en este caso tienes libertad total para liberar tu vena artística y creativa). Pero si estás buscando un retrato «convencional», ten muy presente que los ojos han de estar muy bien enfocados. Y en el caso de usar una profundidad de campo tan pequeña en la que sólo enfoques un ojo, recuerda enfocar el más cercano a ti.

2. Aplica la ley de la mirada

Por supuesto que no es obligatoria y que no vas a ir a la cárcel por no cumplirla ;p Sin embargo, si no la conoces y no la aplicas por desconocimiento, lo más probable es que el retrato no quede tan natural como tú esperas. Puedes jugar con el espacio delante de la mirada tanto como desees, pero siempre con un fin. Lo normal es que dejes más espacio en la zona hacia la que se dirige la mirada de tu modelo. Para profundizar un poquito más, no te pierdas este artículo.

3. Cuenta algo

Como último consejo básico y general que puedes aplicar a cualquier tipo de retrato, sea de día o de noche, en interiores o exteriores, te diré que cuentes algo de la personalidad de tu modelo. No te limites a fotografiar a un maniquí, tienes delante a una persona que tiene sentimientos, miedos, expectativas, experiencias pasadas… Su mente y su corazón están a rebosar de ellas y su cuerpo y su rostro son los medios a través de los que se expresan. No olvides nunca esto y procura contar aunque sea un poquito de esa persona con tu cámara. Por algo los fotógrafos se ganaron la fama de «ladrones de almas»… 😉

Intenta transmitir algo de su personalidad
Intenta transmitir algo de su personalidad

4. Modo manual

Utiliza el modo manual de tu cámara, si usas el automático, por mucho que utilices el modo retrato o retrato nocturno (si tu cámara dispone de él), el resultado nunca será mejor que el que puedes lograr tú en manual, configurando todos los ajustes a tu gusto. El modo automático puedes usarlo cuando no tengas más remedio, pero no por norma general.

5. Apertura amplia

Utiliza una profundidad de campo pequeña o, lo que es lo mismo, una apertura amplia. De este modo desenfocarás el fondo, algo que sirve para todo tipo de retratos, pero además conseguirás captar mucha más luz, muy útil especialmente a la hora de realizar un retrato de noche, y lograr el conocido efecto Bokeh con las luces del fondo.

6. Enfoque manual

El enfoque automático suele funcionar peor con falta de luz, por eso te recomiendo que enfoques manualmente. En el caso de tener que retratar a alguien que está en movimiento, el enfoque manual es complicado, prueba con el enfoque automático y en modo AF-C/AI Servo (Nikon/Canon).

7. Flash

Siento decirte que el flash que viene incorporado en tu cámara no te servirá de mucho por no decir de nada. Si no dipones de un flash externo, mejor búscate otros recursos porque de lo contrario lo único que lograrás es un «flashazo» en toda la cara, como el conocido «zas, en toda la boca». Con esto quier decir que este flash lo único que hace es iluminar mucho justo lo que tiene delante (tu modelo si está cerca, si no tampoco) y dejar el fondo completamente a oscuras. Además de la ceguera temporal, nada agradable, el efecto resultante tampoco lo suele ser, especialmente cuando la iluminación ambiental es muy escasa. Para solucionar esto puedes o usar un flash externo rebotado o difuminado, si deseas un efecto más suave, o de forma directa si lo que buscas más dramatismo, como por ejemplo la siguiente imagen:

Usar el flash, ¿sí o no?
Usar el flash, ¿sí o no?

También puedes hacer uso de las luces disponibles a tu alrededor, una farola, un foco, la luz de un escaparate, una lámpara si estás en interiores… Toda luz que pueda iluminar a tu modelo de forma continua y sin destello, será mucho más cómodo para los dos y os permitirá una conexión mucho más cercana y directa, sin interrupciones lumínicas. Esto es muy importante a la hora de «robar» su alma 😉

8. ISO

Nos da un miedo terrible subir el valor ISO por el ruido que pueda provocar en la foto. Esto tiene su justificación en muchas ocasiones, en otras no tantas. Cuando se trata de un macro, una foto en la que la nitidez es importante, un trabajo profesional o simplemente consideras que el ruido puede estropear la foto, es importante tenerlo en cuenta. Sin embargo, hay otras ocasiones en las que puedes plantearte qué prefieres, si meter un flashazo, usar el flash externo (con lo que eso conlleva) o simplemente subir el valor ISO y poder disparar relajadamente, en medio de una charla con la persona que tienes delante, sin que tenga que sufrir los fogonazos y se sienta fotografiada o «asediada». Puede que la imagen tenga más ruido, pero a cambio también puede que ganes en alma. Observa esta foto, según su autor, a los ojos, apenas se distinguía la figura por la falta de luz. No te voy a pedir que subas hasta 12.800 como en esta foto, eres tú quien debe conocer su cámara y saber hasta dónde puedes subir y cuándo 😉

Subir ISO o no subir, esa es la cuestión
Subir ISO o no subir, esa es la cuestión

9. Juega con las luces ambiente

Las luces que haya alrededor pueden servirte tanto para iluminar a tu sujeto a retratar como para darle un toque creativo y estético. Juega con ellas e inclúyelas como elemento protagonista de la imagen, puedes hacer bokeh o utilizarlas como encuadre natural, como en las siguientes imágenes, o puedes hacer lo que mejor te parezca, ¡pero no te olvides de ellas!

Bokeh
Bokeh
Encuadre natural de luces
Encuadre natural de luces

10. Trípode

Siempre que puedas utiliza un trípode. De esta forma podrás tener más tiempo el obturador abierto, no demasiado ¡que tu modelo no podrá moverse!, pero lo suficiente para que te permita capturar más luz del ambiente.

Para terminar, te dejo algunos trucos que espero que te sirvan de ayuda 😉

  • Busca un lugar muy iluminado y que aporte algo al retrato.
Localizaciones con luz
Localizaciones con luz
  • Prueba con los retratos en blanco y negro, el resultado puede ser muy intesante por los contrastes entre zonas iluminadas y oscuras.
Prueba con el blanco y negro
Prueba con el blanco y negro
  • Para dibujar una silueta luminosa de tu sujeto, coloca una fuente de luz tras él, bien un foco, un flash o una lámpara. Tendrás un resultado similar al de la imagen siguiente.
Contraluz artificial
Contraluz artificial

Como ves, no sólo el día es un buen momento para hacer retratos, la magia de la noche también puede ayudarte a lograrlos y darles un punto de misterio, de fantasía o de lo que te propongas. Utiliza los recursos que tienes a tu alrededor (luces, fondos…) y despliega todo tu arte para robarle el alma a tu modelo a la luz de la luna o de las luces de neón 😉

Si crees que este artículo puede servir de ayuda a alguien más, no olvides compartirlo en Facebook, Twitter o Google + (o en los tres 😉 ). Este no es el único favor que te voy a pedir hoy, el otro es que en cuanto anochezca, tomes tu cámara y agarres del brazo a quien tengas disponible para practicar, porque si no lo haces, todo lo que has leído, en unas horas (o menos) se te habrá olvidado y no te habrás servido de nada leer todo este texto. Así que… ¡a practicar! Gracias por llegar hasta aquí y hasta la próxima.