Que necesitas el agua para vivir lo sabes de sobra. Esto es desde el punto de vista físico, biológico, pero ¿te has planteado alguna vez si podrías vivir sin agua desde un punto de vista más poético? Muchas veces he oído decir «no podría vivir sin música» (yo tampoco) pero nunca escuché «no podría vivir sin agua». Supongo que es por lo obvio que resulta, pero imagínate que no fuera necesaria para mantener con vida a cualquier organismo vivo, que pudieras sobrevivir sin agua. ¿Te imaginas tu vida sin ella? Yo no.
No puedo imaginar un mundo sin mar, sin ríos, sin la lluvia, sin manantiales o sin el rocío que baña las flores al alba. El agua está tan presente en nuestras vidas que no pensamos en que nos pueda faltar, o qué haríamos si no existiera, sin embargo nos gusta el agua, nos chifla, nos apasiona y por eso nos encanta retratarla de cualquier forma. Pero es que además el agua es muy fotogénica, da igual que la fotografíes en la inmensidad de un océano o en una diminuta gota que cae de una rama. Siempre queda bien en la foto. ¿A que sí? Te lo pregunto con la seguridad de que alguna vez el agua ha aparecido en una foto tuya, como protagonista o como fondo, pero seguro que la has retratado.
En el post de hoy no te voy a contar cómo fotografiar el agua. No te voy a dar consejos para ello, ni realizar un tutorial, no. Hoy voy a hacer que sea tu imaginación la que trabaje. Pero te lo voy a poner muy muy fácil. Te daré unas cuantas ideas para retratar el agua y a partir de ahí, si dejas libertad a tu creatividad, seguro que te da unas cuantas ideas más. ¡Las ideas llaman a las ideas! ¿Te apetece conocerlas? Pues ahí vamos, ¡acomódate!
1. Reflejos
Los reflejos son una de las formas más atractivas para el ojo a la hora de fotografiar el agua. Ésta forma una capa reflectora que actúa prácticamente como un espejo ofreciendo como resultado una imagen simétrica, llena de armonía y muy agradable para la vista. Los reflejos se pueden capturar en un mar, un lago o incluso un charco. Hace muy poquito dedicamos el reto semanal a los reflejos, no eran exclusivamente en el agua pero sí muchos de ellos. Te animo a que te des un paseo por las galerías de participación y cojas algunas ideas.
2. Explosión de un globo
Disparar en el momento exacto en el que haces explotar un globo lleno de agua da como resultado una impactante imagen. Esto es algo que sucede tan rápido que por mucho que nuestros ojos lo vean, nuestro cerebro no es capaz de procesarlo, por eso resulta una imagen totalmente inusual para el espectador y por tanto tremendamente atractiva.
Necesitarás buena iluminación porque este disparo deberás hacerlo a velocidades muy rápidas para congelar el movimiento del agua. Si te buscas un ayudante te facilitará la tarea y, muy importante, no desesperes, si no te sale a la primera, ni a la segunda, sigue intentándolo, cada vez te saldrá mejor y cuando lo consigas te sentirás tan orgulloso/a de ti ¡que querrás darte besos!
3. Gotas de agua
Otra tarea para la que necesitarás armarte de paciencia pero con la que puedes lograr unos resultados espectaculares es fotografiar una gota de agua. Seguro que ya habrás visto muchas imágenes parecidas de gotas de agua, pero hay diferentes variables con las que puedes jugar para lograr algo más creativo y original. Juega con el fondo cambiando los colores, tinta el agua del recipiente o la de las gotas. Para estas últimas puedes utilizar varios tintes y dejar caer varias a la vez. O puedes hacerlo todo, no hay límite para la creatividad, lo decides tú. Aquí tienes un ejemplo la mar de interesante (si visitas su galería te encontrarás con un montón de ejemplos que merecen la pena ver). No te preocupes si no sabes muy bien cómo comenzar, Mario te cuenta paso por paso cómo fotografiar una gota de agua sin morirte de desesperación.
4. Abstracto
Un reflejo en movimiento, un recipiente con agua, gotas de aceite y un filtro de colores, salpicaduras de agua sobre una superficie colorida… Son muchas las formas en las que puedes convertir el agua en arte abstracto. Aquí te dejo dos ejemplos, ¿se te ocurre a ti alguno más?
5. Rocío en las plantas
El rocío de la mañana sobre las plantas es pura poesía visual. Si no eres de las personas más madrugadoras del mundo mundial… un truco: lleva un dosificador en spray lleno de agua y rocía con él las plantas que quieras retratar, no será lo mismo pero puede valer 😉 . Aquí tienes algunos consejos para fotografiar flores y todo lo que necesitas saber sobre la fotografía de plantas (te pueden venir muy bien).
6. Splash
O lo que viene a ser la salpicadura del agua. Una zambullida en el mar o en la piscina, un salto sobre un charco o un manguerazo a toda presión pueden dar como resultado imágenes frescas, divertidas, con mucho ritmo y sobre todo muy atractivas. Aquí tienes un ejemplo, pero si pones «splash» en el buscador, encontrarás cientos (o miles… 😉 ).
7. Rompe el agua
Si es que se puede romper… Me refiero a que rompas su quietud, la lisa barrera que separa el agua de la superficie. Una mano que la golpea, un pie o cualquier otro objeto pueden servir para lograr una imagen similar a la del ejemplo. Como verás, el fondo negro funciona espectacular en estos casos, pero también puedes probar con otros fondos.
8. En el aire
Mira este ejemplo, imagino que está disparado a la misma vez que alguien lanza un recipiente con agua y la naranja. Anímate a probarlo, no tiene por qué ser una naranja, puede ser una fresa, una pelota de tenis o lo que se te ocurra que pueda quedar bien. Tampoco tiene por qué ser el fondo blanco… inventa, prueba y elige la opción que más te guste. Eso sí, tendrás que echar mano de alguien que te ayude o de un disparador automático y trípode. ¡Ah! Y cuenta con que el suelo se llenará de agua, así que hazlo en un sitio en el que no pase nada si caen litros de agua, tendrás que repetirlo más de una vez 😉 .
9. En una copa
En una copa o cualquier otro recipiente que sea bonito. Este ejemplo, según su título está realizado con champagne, pero bien podría realizarse con agua. Te aconsejo practicar antes el «tiro a la copa» porque tendrás que lanzar algo dentro para que el agua salte de esta manera y a la vez disparar… mejor buscas ayuda, ¿verdad? 😉
10. Desde el techo
Los días de lluvia ofrecen un sinfín de posibilidades para fotografiar el agua, una de ellas es las gotas que caen desde el techo. Si eres de las personas a las que la pereza le gana la mayoría de las batallas, esta es tu idea «ideal», pues no es necesario ni que salgas a la calle, vale con que tengas un balcón o similar.
11. En una tela de araña
Fíjate qué forma tan bonita queda cuando la lluvia (o un spray dosificador) bañan una tela de araña. Haz una foto similar, pero dejando tu propia huella. Seguro que encuentras la manera, jugando con la perspectiva, la composición, el espacio negativo…
Para terminar, te dejo algunos ejemplos inspiradores y te recuerdo que eres tú quien tiene que jugar, divertirse y experimentar. Esto son sólo unas pocas ideas para que te animes a intentarlo y a buscar otras formas. Los únicos límites para la creatividad están en tu cabeza, ¡¡ya es hora de que los rompas!!
Si te ha parecido interesante o útil, te agradecería que lo compartieras en Google +, Twitter o Facebook para que otros también «se mojen» 😉 . Y ni te cuento lo feliz que me haces si me regalas un «Me gusta». ¡Gracias y hasta la próxima!