Nota del Editor: Me he dado un par de semanas de vacaciones 🙂 (en breve subiré fotos-testimonio a mi galería de Flickr). Por el momento, os dejo con un artículo del archivo sobre algunos de los «engaños» con los que los fabricantes de cámaras de fotos intentan embaucar al pequeño comprador.
A la hora de querer comprarse una cámara de fotos muchos se preguntan qué funciones o características deberían tener en cuenta a la hora de comparar una cámara. La gente se pierde con la terminología complicada de las cámaras y lo que buscan es una cámara que les ayude a conseguir buenas fotos y que esté bien de precio. Punto.
Sin embargo, toda cámara trae algunas características/funciones que en mi humilde opinión NO SIRVEN PARA NADA (sé que esta frase levantará polémica jejeje) y lo único que consiguen es que paguemos UN PRECIO MÁS CARO por unas funciones inútiles.
¿Quieres averiguar cuáles son?
4 grandes engaños de los fabricantes de cámaras digitales
El engaño de los Megapíxeles
Muchos megapíxeles no significan necesariamente mejor calidad. Los megapíxeles sirven para que la foto conserve una buena calidad aunque se vaya a imprimir en un formato grande. Por ello, es verdad que cuanto mayor sea el tamaño en el que vayamos a imprimir la foto, mayor número de megapíxeles necesitaremos. Vale, pero a decir verdad, la mayoría de las cámaras digitales hoy en día tienen un número de megapíxeles más que suficiente para el uso y la impresión que una persona particular pudiera necesitar. 8 megapíxeles son más que suficientes, 10 megapíxeles cumplen con la función de sobra. ¿Para qué quiero yo una cámara de 28 megapíxeles? ¿A caso voy a imprimir la foto en un poster gigante que colgaré en enormes paneles publicitarios? Si fuera ése el caso, sí, convendría tener muchos megapíxeles, de lo contrario 8 megapíxeles, 10 ó 12 son más que suficientes.
Lo de los megapíxeles por lo tanto no es más que una bobada que los fabricantes utilizan para hacernos pagar más. Siempre que tengáis entre manos una cámara de 8 megapíxeles, os serán suficientes. Si la cámara trae más megapíxeles pero por el mismo precio, genial, pero nunca paguéis un precio más caro sólo por tener mayor número de píxeles.
Los megapíxeles «interpolados»
Éste es otro engaño de los fabricantes de las cámaras fotográficas. En esta ocasión el engaño es peor. Se trata de los megapíxeles interpolados, quiere decir que la cámara tenga unos megapíxeles «reales», por ejemplo 10, pero además de eso que la cámara sea capaz de «forzar» esos 10 megapíxeles para que parezcan más. Esto es otra tontería porque lo que realmente interesa con respecto a los megapíxeles es cuántos megapíxeles REALES tiene la cámara, y como hemos visto en el punto anterior incluso esto no es tan relevante a partir de un momento dado, pero megapíxeles forzados o «interpolados» eso sí que NO SIRVE ABSOLUTAMENTE DE NADA, porque ahí la cámara lo único que hace es agrandar la foto «imaginándose» más megapíxeles sacrificando en ello la calidad de la foto.
El zoom digital
En fotografía, el único zoom que importa es el óptico, el zoom de verdad. A parte del zoom óptico, existe lo que se llama zoom digital, que utilidad no tiene ninguna. A lo sumo el zoom digital lo único que hace es agrandar la imagen, haciendo que ésta pierda nitidez y calidad. Para eso es mejor hacer la foto y posteriormente agrandarla en el ordenador a posteriori.
Los que vayáis a comprar una cámara digital réflex no tendréis este problema nunca porque en las cámaras réflex el único zoom que hay es el del objetivo y éste es totalmente óptico.
Sensibilidad ISO
En principio la sensibilidad ISO de una cámara ayuda a captar fotos en condiciones de poca luz (por ejemplo un atardecer, o una esquina con muy poca luz). En este tipo de casos se recomienda subir el valor ISO de la cámara y normalmente veríamos, como por arte de magia, cómo la foto sale más iluminada.
Cuando tenemos suficiente luz, normalmente dejamos el ISO en un valor bajo (como 100 por ejemplo) o automático. Cuando vemos que hay menos luz, lo subimos a un valor ligeramente superior, por ejemplo 200.. Si las condiciones son muy oscuras, tal vez lo tengamos que subir un poco más, 400 por ejemplo.
El problema surge debido a que, cuanto más subamos el valor ISO, más ruido sale en la foto. Esto es así. Ninguna cámara ha conseguido hoy en día ofrecer altos valores ISO sin que éstos estén acompañados de un ruido que estropea totalmente la foto.
Por lo tanto, pasa como con los megapíxeles: necesitamos tener un mínimo de ISO en la cámara, pero no es imprescindible llegar a cifras muy altas de ISO, básicamente porque no las usaremos nunca, disparar a ISOs extremadamente altos hará que nuestra foto salga llena de ruido.
Por otro lado, por algo tenemos flash en la cámara. Éste se encargará siempre de iluminar nuestros encuadres y hacer que no necesitemos recurrir al ISO prácticamente nunca. Otra solución es disparar a una velocidad de disparo más lenta, abrir el diafragma. En fín, para captar luz soluciones no faltan, pero no os dejéis engañar por el timo del ISO (a menos que os demuestren con fotos-prueba disparos a ISOs extremadamente elevados sin que aparezca ruido alguno).
Moraleja
No hay que obsesionarse con las prestaciones de la cámara. Una buena foto no la hace la cámara, la haces tú.
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