Nota de Mario: Si te te interesa la fotografía de retrato el artículo es de lectura obligatoria: en él Vicente Nadal explica las distintas formas de iluminación y tipos de flash para sacarle el mayor partido posible a tu sesión de retratos.
¿Quieres hacer buenos retratos? Lee el artículo, anda.
Iluminación clásica y suave
Como norma general para fotografiar retratos necesitaremos una luz suave y que ésta esté algo alejada de nosotros y algo por encima. El flash directo de la cámara siempre será la peor opción. Los mejores resultados los obtendremos si ponemos un flash externo situado cierta distancia a la derecha o izquierda de nuestro modelo y ligeramente más alto que su cabeza. También podemos rebotar los flashes al techo en interiores para crear efecto difusor. En este caso es muy importante tener en cuenta el color de las paredes y el techo porque teñirán las fotos con su color.
Iluminación dramática y de contraste
La luz puede venir casi de donde nosotros queramos, incluso desde atrás y desde arriba, la creatividad no tiene límites. Cuanto más por detrás, y más alto, más contraste generamos.
Iluminación de día con flash o reflectores
En exteriores de día podemos usar el flash u otra superficie reflectante para suavizar las sombras y rellenarlas. Para mejorar la suavidad del flash (sea de día o de noche) podemos rebotar éste contra una superficie grande blanca, un cartón, un trozo grande de porex o incluso un paraguas (lo que yo uso normalmente). Hay discos reflectores de diferentes diámetros y tonalidades para este efecto. Luego veremos más accesorios en este sentido.
Bricolaje, complementos y accesorios
Hay situaciones intermedias como cuando no podemos separar el flash de la cámara o no contamos con un flash de zapata que posea cabezal basculante. En estos casos tendremos que usar el ingenio para suavizar y dirigir la luz. Vamos a ver algunas situaciones y qué acciones podemos hacer así como algunos accesorios que nos pueden venir bien, espero que no se me pierda nadie 😉
Cámaras compactas y teléfonos – Bricolaje
El caso de iluminación más simple con flash es cuando hacemos las fotos con nuestra cámara compacta o con el teléfono. En este caso tenemos una fuente de luz muy pequeña, casi puntual, y que está muy cerca del objetivo. En los teléfonos ambos elementos, objetivo y flash, están tocándose normalmente.
Este es el peor de los escenarios que podemos tener porque la luz que nos ofrece es totalmente frontal y puntual. Esto nos dará retratos con sombras duras y bastante poco estéticas.
¿Podemos solucionarlo o mejorar el resultado? Sí, claro que se puede, con un poco de ingenio casi todo se puede lograr… aunque tus amigos te miren como un bicho raro.
Puesto que no podemos separar el flash y alejarlo del objetivo nos tendremos que conformar con suavizar la luz. El método más simple es poner delante del flash cualquier superficie translucida, como el papel vegetal, a unos centímetros de nuestro flash.
Hay que tener cuidado porque cuanta menos luz pase más problemas tendremos para iluminar nuestro retrato.
Un truco de bricolaje podría ser el siguiente:
- Coge un vaso de plástico corriente.
- En la base haz una ventana por la que asome justo el flash de tu cámara. Ten cuidado de hacer la ventana de modo que no tape el campo de visión del objetivo.
- Con un elástico o cinta adhesiva fija algún material translúcido.
- Haz unas pruebas. Seguramente tendrás que hacer algún tipo de ajuste.
En definitiva cualquier elemento translúcido que se interponga entre el flash y nuestro retrato provocará una luz más suave… aunque sólo sea un poco.
Como ves una cámara compacta o un teléfono no son los medios ideales para hacer un retrato con flash, pero eso no quiere decir que no puedas intentarlo y pasártelo bien mientras lo haces.
Cámaras réflex y cámaras puente – Complementos y accesorios
En estas cámaras el flash suele ser del tipo retráctil, que se eleva unos centímetros cuando se activa. Aún así sigue siendo una fuente muy pequeña de luz y demasiado cercana al objetivo.
Aquí también podríamos colocar un trozo de celofán o papel vegetal sujetado con cinta adhesiva para suavizar la luz.
En las cámaras réflex y en algunas cámaras puente se pueden desconectar los predestellos del flash (normalmente en manual) y hacer que haga un sólo destello en el momento de la toma.
Con este ajuste podríamos usar una fotocélula para disparar a distancia otro flash al mismo tiempo que se activa el nuestro. Hay fotocélulas que incorporan una zapata para conectar el flash esclavo. En caso de no ser así necesitaremos que este segundo flash tenga opción de conectarse por cable sincro además de mediante zapata. Otra opción sería disponer de una zapata accesoria con cable sincro.
Este segundo flash puede ser incluso el principal o dejarlo de relleno para el fondo o para reforzar una iluminación lateral.
Hay unidades de flash que se pueden comportar como esclavos y que reaccionan ante el disparo de otro de su misma familia: los flashes externos de las marcas Canon y Nikon pueden ponerse como esclavos de los flashes que tienen integrados estás cámaras en sus modelos réflex. Así podemos crear un pequeño estudio portátil sin necesidad de invertir mucho dinero.
Foto de la derecha: Flash esclavo sobre trípode de viaje. Se puede ver el cable sincro conectado en su enchufe. También vemos el difusor de plástico translúcido que viene de serie para suavizar la luz. Su efecto es mayor si levantamos la cabeza del flash.
El flash Nikon SB800 puede ser Maestro o esclavo. A la derecha pantalla de configuración de la Nikon D600 para comunicarse con otros flashes Nikon. Desde aquí se puede controlar la potencia, el modo de disparo y el canal de comunicación.
Un accesorio bastante económico y poco conocido es un cable sincro TTL en espiral que se coloca en la zapata del flash y en el otro extremo lleva otra zapata para nuestro flash. Este cable nos permite multitud de opciones, desde montar el flash en una regleta junto a la cámara pero más alejado o sujetarlo con la mano alejándolo (un ayudante lo puede hacer) mientras disparas la foto. Al ser TTL transmite toda la información de la cámara al flash y viceversa.
Pero para mí el rey de los accesorios es el emisor receptor de radio para flash. Con este accesorio puedes controlar varios flashes al mismo tiempo y decidir cuál de ellos se dispara.
El emisor se conecta a la zapata de la cámara o al contacto X y emite una señal de radio para activar los otros flashes. La ventaja de usar la radio es que no le afectan los predestellos que hace nuestra cámara para medir la luz TTL pudiendo combinar el uso de un flash en TTL montado y otros externos en manual. Actualmente ya existen equipos de radio con TTL pero con un precio considerablemente mayor.
En la fotografía de moda suelen hacerse las fotos con flashes en forma de anillo. Éstos tienen la ventaja de dar una luz muy uniforme por todas las direcciones sin ninguna sombra. Hay accesorios que permiten a nuestro flash de zapata suavizar su luz creando una ventana (llamada softbox) a su alrededor o incluso imitar a un flash anular.
Aunque estos accesorios no son baratos normalmente siempre tienes la posibilidad de encontrar en internet tutoriales para crear efectos similares.
Para terminar me gustaría dejaros un vídeo muy interesante que explica con ejemplos en vivo algunos de los esquemas más habituales de iluminar un retrato:
Como siempre, espero que hayas disfrutado de esta lectura. No dudes en compartir este artículo si crees que otros pueden encontrarlo útil.