Si la semana pasada te pedí que miraras en blanco y negro esta vez te reto a que respires aire puro. Sí, sí, como lo lees, tendrás que lanzarte al único sitio en el que se respira aire limpio: la naturaleza.
¿Cómo Funciona? (Recordatorio)
Cada semana propondré un nuevo reto, se trata de un tema que tendréis que plasmar en una fotografía y subirla a la página de Facebook del blog poniendo en la descripción la palabra clave que os iré indicando para cada tema. Los temas serán variados, desde retratos hasta fotografía Macro, pasando por paisajes, fotografía en blanco y negro, o de bebés. Los temas serán propuestos los sábados, para que así tengáis todo el fin de semana para trabajarlos. Tendréis de plazo para subir vuestra fotografía una semana (una foto por participante), hasta el viernes de la semana siguiente. El viernes o sábado actualizaré el artículo con la foto que más me haya cautivado y propondré un nuevo tema, y así…
Reto Semanal 105: Retrato en la Naturaleza
Aunque nos hemos vuelto unos urbanitas de cuidado, si pensamos sólo un poquito recordaremos que en realidad nuestro entorno «natural» es la naturaleza (valga la redundancia), el entorno en que vivimos es un mundo que nosotros hemos creado de forma artificial y, aunque nos sintamos muy cómodos en él, donde mejor habitan nuestros cuerpos y nuestras mentes es en plena naturaleza, aunque no lo creamos, aunque nos den miedo los bichos o los animales salvajes… Todos esos son miedos que hemos aprendido y que son culpa de un exceso de vida en la ciudad.
Por eso me gustaría que te perdieras un rato por un entorno verde (o azul). Puedes perderte con alguien o llevarte un trípode para autorretratarte, lo esencial es que os mimeticéis con el entorno, que la naturaleza sea coprotagonista de tu retrato, que nos de una envidia tremenda al ver tu foto y queramos ir corriendo a realizar retratos en pleno bosque, playa, selva o alta montaña, que nos olvidemos de los miedos a los bichos y las alturas y y salgamos corriendo a capturar la esencia del ser humano en plena naturaleza. ¿Te animas?
Como de costumbre, para participar en el reto de esta semana sube tu foto al muro de Facebook del Blog del Fotógrafo: En la descripción de la foto menciona por favor la palabra clave “Reto Retrato en la Naturaleza” seguida de un título de tu elección.
Medios Alternativos Para Participar
Para los que no seáis de Facebook he habilitado nuevas redes sociales para participar.
- Flickr: accediendo al Mural de Grupo del Blog del Fotógrafo y subiendo la foto directamente. Dale a tu foto un título y asegúrate de mencionar “Reto Retrato en la Naturaleza” en el mismo.
- Twitter: subiendo la foto directamente a Twitter con el hashtag #RetoRetratoEnLaNaturalezaBdF
Feliz fotografía.
Actualización
Os dejo con los retratos más destacados de esta semana. Gracias por participar y por poner tanta ilusión cada semana como la que ponemos desde el equipo del blog para que los retos continúen siendo posibles 😉
Esta semana no voy a destacar la fotografía mejor realizada a nivel técnico, esta vez me voy a quedar con una imagen que cumple perfectamente con lo que pedía al proponer el reto. Una imagen que cuenta una preciosa historia, que me ha removido por dentro, que ha hecho que quiera perderme este fin de semana en un bosque o en pleno campo. La fotografía de Amalia Zilio podría tener posiblemente un mejor contraste, nitidez o saturación, sin embargo, todo eso no serviría de nada si no transmitiera la «Magia en el bosque» que transmite. Es una imagen sencilla pero correcta a nivel compositivo y de enfoque cuya su historia tiene más fuerza y más peso que los detalles técnicos. Una niña que se olvida del mundo, una Alicia en su país de las maravillas con el conejo como mejor amigo. No necesita nada más. Es parte del entorno, está mimetizada en él, de hecho parece vivir en ese bosque, más concretamente en el árbol que hay tras ella. La niña y el conejo, felices en un entorno cuyo únicos ruidos son los de otros animales, el crujir de las hojas secas o el canto del viento. Sin polución, sin prisas, sin contaminación acústica ni lumínica, un lugar mágico en el que se nos olvida perdernos, nuestra verdadera casa, el lugar a donde pertenecemos pero al que no queremos mirar ni cuidar. Esta pequeña debería servirnos de ejemplo para reencontrar a nuestro niño interior, a recordar lo importante de la vida, a pararnos un momento y, si es necesario, bajarnos de este tren de alta velocidad en el que vivimos y disfrutar del paisaje. Muchas gracias Amalia por transmitirnos esta magia, y muchas felicidades porque estás en el buen camino dentro la fotografía.