ave africana
Fotografías cortesía de Wynand van Poortvliet, Vincent van Zalinge, Ray Hennessy , Ian Parker, Arvid Høidahl, Todd Steitle, Nick Kwan bajo licencia Creative Commons.

Cómo Fotografiar Aves en Vuelo y en Reposo para Lograr Resultados Espectaculares

Este es un artículo de nuestro autor invitado Diego que hoy te explica cómo fotografiar aves en vuelo y en reposo. Y si lo que quieres es profundizar en la fotografía de naturaleza, esta es nuestra guía más completa, con consejos, trucos y mucha inspiración.

Fotografiar aves no es sencillo: no suelen posar para ti, y si te acercas demasiado, lo más probable es que salgan volando.

Por eso, la principal dificultad de este tipo de fotografía es el movimiento.

Un colibrí puede batir sus alas hasta 60 veces por segundo, ¡y un águila imperial puede volar a 150km por hora!

Es muy distinto fotografiar un puffin relajado entre las rocas que hacerlo cuando está pescando y zambulléndose continuamente en el mar.

ave en reposo
Puffin en la costa deDyrhólaey, Islandia.

Por eso, la fotografía de aves se clasifica en dos tipos:

  • Fotografía de aves en reposo
  • Fotografía de aves en vuelo

En este artículo descubrirás todas las diferencias entre cada tipo de fotografía y algunos trucos con los que conseguirás hacer fotos espectaculares de aves.

Cómo fotografiar aves en reposo: tipos, consejos y trucos

Fotografiar aves en reposo es el tipo de fotografía de aves más sencillo.

Aunque depende del tipo de ave que busques, si quieres poder practicar este tipo de fotografía lo más fácil es que te acerques a una laguna, a las rocas de un acantilado, o que prestes atención a las ramas de los árboles.

Además, te recomiendo que empieces fotografiando aves grandes porque son más previsibles y sus movimientos son más lentos. Las grandes aves de humedales como garzas, grullas o flamencos son los modelos perfectos.

1. Retratos de aves

Cuando se fotografían aves en reposo, lo más habitual es hacer un retrato en el que el ave sea el elemento principal de la fotografía.

Ave reposando en una rama con bokeh de fondo
Bokeh de una pequeña ave en la Reserva Natural de Oostvaardersplassen, Países Bajos.

Si quieres darle un toque más profesional a tus fotos puedes hacer un bokeh, como en la foto anterior, con lo que conseguirás que el pájaro esté enfocado y el fondo de la imagen desenfocado.

La técnica es la misma que para hacer un bokeh de personas u objetos, la magia está en reducir la profundidad de campo.

Claves para lograr un buen bokeh

  1. Abre la apertura del diafragma de tu cámara para que entre más luz (f/2, f/1.8, f/1.4…).
  2. La distancia de enfoque importa: cuanto más cerca estés del ave mayor será la distancia desenfocada detrás de él.
  3. Usa un objetivo con una distancia focal larga (entre 70-400 mm).

Pero el consejo más importante para hacer retratos de aves es que siempre (¡siempre!) trates de enfocar a los ojos del pájaro.

A veces es complicado.

Puede que se mueva justo cuando vas a disparar o que tu cámara enfoque al pico por error, pero es fundamental si quieres presentar tus fotos a un concurso 😉

Además de esto, otras consideraciones importantes para que consigas sacar el máximo partido a tus retratos son:

  • Iluminación: por la tarde y por la mañana tendrás la mejor luz. Busca un ángulo en el que la luz le ilumine la cara al ave.
  • Fondo: busca un fondo que tenga una composición de colores limpia (que no tenga demasiados colores distintos) y procura que haya bastante distancia entre el pájaro y los objetos que están detrás de él.
  • Composición: no encuadres al ave en el centro. De esta manera, le dará un sentido de dirección a la imagen.

Después de localizar al ave que quieres fotografiar y de hacer todos los ajustes necesarios en tu cámara, te tocará esperar a que el ave ponga una pose interesante para tu foto.

Y a veces, la espera se hace larga…

Pero vale la pena.

No es lo mismo disparar cuando una garceta tricolor te está dando la espalda que fotografiarla mientras está pescando.

Garceta pescando
Garceta tricolor en Florida, Estados Unidos.

Mientras esperas, ve tirando fotos de prueba. Te ayudarán configurar mejor tu cámara y puede que no tengas más oportunidades porque el pájaro se vaya volando.

Siempre es mejor tener una foto normalita que no tener ninguna.

Si no tienes una foto que lo pruebe, nadie te creerá cuando digas que has visto una grulla damisela 😉 .

2. Fotografía de aves y foto de paisaje

Otro tipo de fotografía de aves en reposo es integrarlas como un elemento dentro de una fotografía de paisaje.

En estas fotos el ave no aparece aislada, sino que se la puede ver dentro de su hábitat y permite conocer el contexto de la foto. Es mi tipo de fotografía de aves favorito.

Para hacer una buena captura tienes que tirar la foto como si fuese una fotografía de paisaje y lograr que el ave (o aves) sea el punto de interés.

Cómo lograr mejores fotos de paisaje con aves

Para que tus fotos de paisajes sean más profesionales te recomiendo:

  • Utilizar aperturas pequeñas de diafragma para que el fondo salga enfocado (es justo al revés que para hacer un bokeh).
  • Usar un objetivo gran angular (entre 16 mm y 24 mm).
  • Usar un trípode para estabilizar la imagen y minimizar las vibraciones.
  • Tener en cuenta la regla de los tres tercios.
  • Hacer las fotos con la luz de la mañana y de la tarde.

Los humedales son paisajes abiertos y muy luminosos, ideales para fotografiar flamencos, garzas, garcetas, etc. Aunque también puedes fotografiar pingüinos en las Islas Malvinas 😉

Pingüinos en la playa
Grupo de pingüinos en las Islas Malvinas.

Cómo fotografiar aves en vuelo

La fotografía de aves en vuelo es más compleja porque tienes que tener en cuenta dos tipos de movimiento a la vez:

  • El desplazamiento del ave
  • El movimiento de sus alas

¡Y algunas aves mueven las alas muy deprisa!

¿Qué aves empiezo a fotografiar?

Te recomiendo que no empieces fotografiando colibríes y que te centres en aves grandes como buitres, grullas, cigüeñas o garzas. Las garzas solo mueven las alas un par de veces por segundo.

Los patos y los gansos también son una buena opción.

Aunque baten las alas más rápido que otras aves (entre 4 y 9 veces por segundo) es sencillo localizarlos en lagunas, no son aves huidizas y su comportamiento es muy previsible.

Ganso volando
Ganso volando en kråkerøy, Noruega.

¿Qué debo tener en cuenta para fotografiar aves en vuelo?

Si quieres tener éxito en la fotografía de aves debes tener la estadística de tu lado: cuantas más veces dispares, más posibilidades tendrás de capturar una foto espectacular.

Por ello, es muy recomendable que vayas a lugares en los que haya grandes poblaciones de aves como parques naturales, lagunas, humedales o dormideros de aves.

La luz también es muy importante. Durante las primeras horas de la mañana y las últimas de la tarde el sol no está demasiado encima y el ave no quedará cubierta por su propia sombra.

Te recomiendo que dispares siempre con el sol a tu espalda: la luz es mejor y evitarás mirarlo directamente en un descuido.

Ajustes para fotografiar aves en vuelo

Pero, además de todo esto, el gran reto al fotografiar aves en vuelo es conseguir que las alas queden congeladas.

Búho de las nieves volando
Búho de las nieves en Alberta, Canadá.

La clave para lograrlo es usar velocidades de obturación muy rápidas. Estas son solo una guía pero te servirán de orientación:

  • Con aves grandes: 1/1000s o 1/1500s
  • Para aves rapaces en vuelo: a partir de 1/2000s
  • Con pájaros pequeños: desde 1/2000s hasta 1/5000s

Para poder disparar con velocidades de obturación muy rápidas tendrás que abrir mucho la apertura del diafragma (incluso al máximo que permita tu objetivo) y subir el ISO para compensar la exposición.

No le tengas mucho miedo al ruido (si subes demasiado el ISO, en la imagen saldrá una especie de grano): es más fácil arreglarlo en el proceso de edición posterior que tratar de editar una foto subexpuesta.

Para poder fotografiar aves a grandes distancias sin que se vean demasiado pequeñas en la imagen, usa un teleobjetivo de al menos 300 mm.

Al fotografiar aves en vuelo tienes que ser muy rápido y, para eso, es importante que tengas tu cámara lista para disparar en cualquier momento. Con estos trucos podrás disparar más veces en menos tiempo:

  • Disocia el enfoque del disparador de tu cámara. De esta forma usarás un botón para enfocar y otro para disparar, lo que te permitirá tener la cámara enfocada y lista para disparar rápidamente.
  • Usa el enfoque continuo (AI Servo en Canon y AF-C en Nikon). Esta opción te permitirá mantener al ave enfocada mientras va volando.
  • Dispara en modo ráfaga. Así dispararás varias fotos de forma consecutiva y tendrás más fotos para elegir.

Y con todo esto… ¡ya estás listo para empezar a fotografiar aves! ¡Ah! Y lo más importante: no olvides enfocar a los ojos del ave.

Este es un artículo de Diego, un apasionado de la observación astronómica y la observación terrestre. Puedes seguir su trabajo en su blog El Gran Observatorio.

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