Fotografías cortesía de: Caro Musso, Alex Proimos bajo licencia Creative Commons.

9 Errores Que Cometí en Mi Primer Proyecto Fotográfico (Que No Te Pase Como a Mí)

Un proyecto fotográfico no es algo que uno se deba tomar a la ligera, no es una tarea que puedas improvisar y mucho menos a la que puedas lanzarte a ciegas. Pues eso es lo que hice yo. Y cometí un error detrás de otro. Porque no conocía los pasos que hay que seguir para llevar un proyecto fotográfico, de hecho no sabía ni que había que tener un «plan» para llevarlo a cabo, porque nunca me había dado por hacer uno. Pero llegó un tema que me motivaba mucho y sin pensarlo me lancé, no fue premeditado, surgió haciendo una foto y me lancé a la piscina. Así pude comprobar uno a uno todos los errores que se pueden cometer cuando no tienes «un plan». Es más, algunos de estos errores hasta los puedes cometer si lo tienes, hay detalles que se pueden escapar. Por eso quiero compartir mi experiencia, para que no te pase lo que a mí, para que preveas hasta el último detalle y que tu proyecto fotográfico sea todo un éxito. ¿Quieres conocerlos?

Mi idea

Mi idea fue la de fotografiar a mi bebé en sus primeros 12 meses de vida. Había pensado muchas fotos para hacerle antes de que naciera, pero creo que no se me había ocurrido algo a largo plazo como esto. Como comprenderás motivada estaba, era mi bebé, le hice una foto que me inspiró, yo toda puérpera con las hormonas revolucionadas y repleta de amor y dije, ¡pues allá vamos!

Y me equivoqué, bueno, no del todo, porque el recuerdo lo tengo, la experiencia también (y encima puedo compartirla contigo), pero si pretendes realizar un proyecto fotográfico debes ir más allá y no esperar a quedarte con el recuerdo y con una patata de fotos si las miras en conjunto. Y no digo que las fotos de este-mi-proyecto lo sean, pues a mí me parecen maravillosas, no porque las haya hecho yo, sino porque sale mi pequeña y están hechas con tanto amor que no puedo verlas como una patata. Ahora, si me pongo las gafas de persona-externa-y-objetiva, pues reconozco que desde un punto de vista fotográfico dejan mucho que desear. ¿En qué me equivoqué? Pues aquí están mis fallos.

PicMonkey Collage

1. No planificar

Ya he comentado que fue algo impulsivo y este fue mi mayor error, desde el principio hasta el final. El «number one», el más grave. Si hubiera planificado, tal vez me habría evitado otros errores. La verdad es que yo soy de impulsos, me gusta actuar y tener resultados rápidos, a veces me funciona, pero es una «tara» de nacimiento que tengo y que he de mejorar si quiero lograr un proyecto fotográfico que merezca la pena de ver o de mostrar. Planifica, planifica y planifica. Hasta el detalle más tonto que se te ocurra. Por ejemplo:

    • No pensar en cuál era el lugar adecuado. El primer mes y el segundo me parecieron estupendos porque mi peque no se movía, pero llegó un momento que me daba tanto miedo que se moviera que ni enfocar decentemente, ni «ná de ná». Colocar a tu bebé encima de una cómoda no es una buena idea, ¡te lo aseguro! Pero claro, ya no podía cambiar porque la idea era fotografiarla exactamente en el mismo sitio, con el mismo fondo…
    • No prever que podía necesitar un ayudante. Claro, es lo que pasa cuando pretendes fotografiar un bebé y sobre todo cuando lo intentas hacer encima de un mueble. Que para hacer las fotos dependes de que esté y claro… no siempre es posible, más cuando vives a 500 km de tu familia y en tu ciudad actual conoces a menos gente que un cangrejo de mar en el desierto. Resultado, sólo cuentas con el papá, que trabaja más horas que un reloj y que lo último que le apetece el fin de semana es ponerse a hacer una sesión fotográfica. Es que el tiempo cuando tienes un bebé es oro, si no lo has vivido no puedes saberlo.
  • No pensar en el vestuario. Y lo bien que hubieran quedado estas fotos si se me hubiera ocurrido comprarle el mismo trajecito de distintas tallas, o al menos uno parecido, porque es que así hay taaaan poca unidad 🙁 Viéndolas todas juntas es cuando te das cuenta de estos detalles. Esto igual se puede solucionar pasando a blanco y negro, pero claro, no todas las imágenes admiten la escala de grises y, además, creo que en este caso perdería mucho, esos tonos de los banderines de tela le dan un punto de ternura a las fotos. Lo ideal es que planifiques desde un principio si las fotos serán en color o en blanco y negro y no que lo utilices para parchear.

1er trimestre_bn

  • Podría haber planificado fotografiarla en cada mes con un gesto característico de su etapa de desarrollo, por ejemplo levantando la cabeza, sentada, gateando, etcétera. También podía haber decidido fotografiarla siempre despierta, pero es que en los tres y cuatro meses que empezaba a rularse me vino de bien que estuviera dormidita… Ahora al verlas todas juntas pues desentona un poco.

2. No limpiar el sensor de la cámara

Claro que estaba yo para pensar en estas cosas… con un bebé de alta demanda, prácticamente sin ayuda, teniendo que currar, etcétera, etcétera, limpiar el sensor era la menor de mis preocupaciones… ¡ERROR! Qué pena que las fotos estén así de «sucias» (snif). Por favor, que no te pase a ti 😉 Da igual lo que fotografíes o cual sea el objeto de tu proyecto.

3. Sobreestimar mi poder sobre la luz

Soy una amante de la luz natural, lo habrás podido comprobar si llevas un tiempo por aquí. Pero es un error no tener en cuenta el flash para ocasiones como esta, es decir, en interiores, en el mismo lugar (haga el día que haga), lejos de la ventana y teniendo que fotografiar un día concreto (su cumplemes, día arriba o día abajo). Todo se me iba complicando, el invierno en esta ciudad no es tan luminoso como en el sur (de donde soy) y había días que estaba tan nublado que las fotos me salían bastante oscuras. Venga a abrir el diafragma, tanto que fallé en el enfoque, porque claro, tenía que disparar rápido por si le daba por lanzarse cómoda abajo… También subía el valor ISO, pero entonces me salían con ruido… Podía haber usado un flash con difusor, una ventana de luz o cualquier objeto que me ayudara con la iluminación sin dañar la vista de mi bebé y sin asustarla, claro. Pero no, yo me creí super-woman-de-la-luz y la ca…, perdón, metí la pata 😉 Moraleja: cuando planifiques tu proyecto, muy importante, ¡¡ten en cuenta la luz!! Si prevés que puedes no tener suficiente luz natural, ayúdate desde el inicio con luz artificial, mezclar una y otra igual no queda muy bien (según cada proyecto, por supuesto).

4. No poner un título

Básico. Antes de iniciar un proyecto debes poner un título, no vale con decir voy a fotografiar la evolución de mi bebé y llamar a la carpeta así mismo, evolución Adriana. No. Esto no debe funcionar así. Un proyecto debe tener un título, será parte del tema, del proyecto. Además te dará algunas ideas a la hora de planificar. Por lo menos le podía haber llamado «12 meses, 12 sonrisas», o yo que sé. Titularlo ahora me cuesta mucho más y me falta la motivación, total, si ya está hecho… y pa qué… con la de fallos que tiene 🙁

5. No guardar todas las fotos en el mismo sitio

Ay, qué caótica soy a veces, sobre todo cuando me falta tiempo. Es que yo pensaba que un bebé solo dormía (otro error que sólo sabes si has tenido uno). Y claro, descargaba las fotos como podía, cuando podía y donde podía. Mal, muy mal. Eso me pasó por no tener un Workflow (me he puesto en modo moderna), es decir, por no tener un flujo de trabajo. Si no tienes uno, plantéatelo o, por lo menos, guarda todas las fotos del proyecto en la misma carpeta (y en el mismo ordenador). Así será más fácil trabajar luego con ellas y no perderás ninguna imagen.

6. No usar la misma orientación

Disparar siempre en vertical o siempre en horizontal es algo que debes plantearte desde el principio, sobre todo si quieres hacer al final un montaje con todas las fotografías. Lo ideal es que haya una unidad estética y esta debe ser una de ellas, a menos que tu proyecto requiera otra cosa. Ahora ves todas las fotos de mi hija en vertical, pero alguna de ellas ha tenido que ser recortada porque tampoco tuve en cuenta este detalle.

7. No editar todas las fotos a la misma vez

Un proyecto fotográfico implica, además de una unidad narrativa, una unidad estética. Si editas cada foto por un lado, sobre todo con mucho tiempo de por medio, fallarás. O luego tendrás que recuperar los originales y repetir todo el trabajo. Si observas mis fotografías, hay diferencia entre unas y otras en la temperatura de color, en contraste, iluminación… Cuidado con esto si no quieres estropear el proyecto ni trabajar doble.

8. No disparar en RAW

Disparar en formato RAW tiene ventajas e inconvenientes. Aquí creo que tiene más ventajas. Me habría ahorrado más de un calentamiento de cabeza al final de haberlo hecho en todas las sesiones y no sólo en algunas. Otra opción es usar RAW+JPG.

9. No imprimir en papel

Mi peque tiene más de dos años y yo aún no he revelado estas fotos en papel. Te parecerá una locura, lo sé, este, junto el de la falta de planificación, son los errores más graves. Me da tanta pena escribir y reconocer esto que antes de apagar el ordenador, ahora que tengo todas las fotos juntas (lo he hecho para escribir el artículo, ya me vale) las voy a pasar a un USB y mañana mismo me saco aunque sea una copia en 10×15, nada de seguir sobreestimando el tiempo que tendré para hacer un álbum o alguna ampliación. Ha llegado el día.

Tu turno

Como ves amor le puse, y mucho. Técnica poca. Errores muchos. Por lo menos me queda el recuerdo, pues mi preciosa Adriana nunca más tendrá entre 0 y 12 meses, y me queda también el aprendizaje. Eso sí, ¡ojalá lo hubiera aprendido antes de que naciera! Ahora te toca a ti tomar nota de estos errores y echar un vistazo a los 9 pasos para llevar a cabo tu proyecto fotográfico.

¿Te ha gustado? ¿Te ha servido al menos? Si ha sido así, te pido que lo compartas. Yo habría agradecido toparme con un artículo así hace algún tiempo 😉 ¡Gracias y hasta la próxima!

  1. Caro, muchísimas gracias por compartir tu experiencia (y errores) con todos nosotros, seguro que nos van a ser de mucha utilidad, igual que lo habrá sido para ti, porque de los errores también se aprende.
    Llevar a cabo un proyecto no es nada fácil, aunque lo pudiera parecer porque no consiste sólo en ponerse a hacer fotos y más fotos. Al final, te das cuenta de que éstas no siguen la línea argumental deseada o que tienen fallos que podrían haber sido solucionados con un poco -o mucho- de planificación, que como tú indicas en tu artículo, es importatísimo tener.
    Sin dejar de lado la importancia de la planificación, el dato de no poner título al proyecto o editarlo todo en conjunto y a la vez me ha parecido muy interesante, por lo banales que podrían parecer esos puntos.
    Como curiosidad, tenía un profesor de fotografía que siempre nos insistía en que todas las fotografías del proyecto debían tener la misma orientación, tal y como tú nos indicas como otro de tus fallos. Quizás alguna fotografía concreta pida una orientación distinta, pero mezclarlas puede llevar a confusión y pérdida de interés.
    Estoy seguro que no vas a volver a caer en estos errores y, muchos de nosotros, gracias a este artículo, tampoco.

    Un saludo.

    1. ¡Dicen que la experiencia es el nombre que uno le pone a sus errores! Lo bueno es que, si uno es bueno escuchando (o leyendo como en este caso) puede adquirir «experiencias» para que los caminos de la fotografía le sean menos sinuosos y más satisfactorios. Saludos y muchas gracias por comentar.

  2. Bueno pues, yo ya metí la pata en todos estos errores y creo que muchos más. Está buenísimo el artículo, así que la próxima vez lo tendré más en cuenta. Solo me queda la duda respecto a la cantidad de tomas en vertical u horizontal ¿No es correcto simultanear entre horizontales y verticales o es una tendencia estética o si la estabilidad en las tomas es más agradable a la vista? Saludos desde Cuba.

    1. Adrían, a mi entender lo más maravilloso que tiene la fotografía y la vida misma es la equivocación. El ser humano aprende de equivocarse y eso hace mavarilloso al error. Para mi no hay nada más perfecto que el error, aunque suene paradójico siempre que no ayude a crecer y a no cometerlo en el futuro. Ahora bien, respecto a tu consulta, te recomiendo que leas el siguiente artículo: encuadres. Saludos.

  3. ¡Hola! Caro, interesante experiencia, pero me quedó dando vueltas, ¿cómo sabes que el sensor esta sucio y en qué momento te das cuenta?, no sé si seré yo o mi pc, pero no veo detalles en la foto como para darme cuenta de que esta sucio. Saludos a la bebé ah! linda, linda 🙂

    ¡Saludos!

  4. Yo soy un aficionado no se, cada vez que tengo la cámara en mis manos mis ojos brillan, y estoy atento a todo lo que me rodea hasta el más minimo detalle y objeto cerca en eso mi mente trabaja y busco esa escencia de plasmar mmm un no se que no puedo expresarlo, nostalgia, recuerdos etc, pero creo que todo lo que hacía era un error ahora que veo el artículo 🙂 Saludos de un aficionado que se vuelve loco con la cámara jejejeje 😀

  5. ¡Excelente artículo! A mi me pasó por suerte, y digo por suerte por que así aprendí. Una consulta, estoy queriendo encontrar una idea de presupuesto sobre fotografía de producto, ¿alguien sabe donde puedo conseguir?

    1. Pablo, hace un tiempo para los lectores VIP se lanzó un artículo de varias hojas explicando como presupuestar un trabajo fotográfico. Puedes buscarlo en Internet ya que fue replicado por algunos sitios. Saludos.

  6. ¡Hola amigos! No soy ningun profesional en fotografía, soy aficionado de tal forma que no tengo mucho conocimiento sobre algunos términos. Quisiera saber cómo captura la mayor parte de un objeto sin que salga desenfocado en alguna de sus partes.

  7. Hermosa ésa bebé. Deja en segundo plano cualquier «error» fotográfico presente.
    Para mí forma de ver, ése proyecto aprobó, porque logró el objetivo.
    «Mirar» no es lo mismo que «Ver».
    Gracias por mostrarlo.

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *