El artículo de hoy está dedicado a los accesorios imprescindibles para la fotografía nocturna. Es cierto que la noche es muy temida por numerosos fotógrafos. Parece que es algo destinado a unos pocos elegidos y/o valientes y es que asusta un poco a la hora de hacer fotos, pero es simple desconocimiento y falta de práctica.
Seguro que si te lanzas verás que no es tan difícil, que solo hay que tener algunos conocimientos básicos para iniciarte en la fotografía nocturna y práctica. La práctica es fundamental y lo que te irá demostrando que no es tan difícil, que con un poco de dedicación, paciencia, ensayo y error, al final todo se logra.
También es cierto que este tipo de fotografía tiene unos requisitos más técnicos que hacen que sea necesario un equipo concreto, es decir, una cámara con la que se pueda fotografiar en Modo Manual y otros accesorios específicos. Esta vez no vale solo con tu cámara y ya. Para conseguir espectaculares fotografías nocturnas algunos son imprescindibles, otros recomendados, pero mejor los vemos uno a uno.
Objetivos para fotografía nocturna
Para probar en fotografía nocturna y ver si te gusta o no el tema, te puede valer con cualquier objetivo que tengas, sin embargo, si quieres profundizar en esta disciplina, necesitarás un objetivo luminoso. Preferiblemente que sea gran angular, salvo que lo único que te importe de la noche sean los cráteres de la luna o capturarla a un tamaño gigante, que en ese caso no tendrás más remedio que irte a por un teleobjetivo de unos 300-400mm mínimo.
Pero si lo que te atraen son los paisajes bañados de estrellas, los lugares abandonados y solitarios al abrigo de la noche, fotografiar la Vía Láctea, las carreteras surcadas por ríos de luces, o los skylines iluminados de las ciudades más pobladas del planeta, no hay duda de que necesitas un gran angular.
Puedes profundizar más en el tema objetivos para fotografía nocturna en el este artículo.
Trípode para fotografía nocturna
Se trata de uno de los accesorios absolutamente imprescindibles en fotografía nocturna. No. No vas a poder hacer una fotografía nocturna sin un trípode por muy firme que sea tu pulso. La fotografía nocturna requiere de unos tiempos de exposición muy largos y es imposible lograrlo a mano alzada.
Esta es la mejor inversión que puedes hacer si tienes claro que la noche te atrapa tanto como para pasar horas a la intemperie con la única compañía del silencio más absoluto, tu equipo y alguna persona incauta que esté dispuesta a acompañarte por amor al arte fotográfico (o a ti).
¿Qué tipo de trípode necesitas para fotografía nocturna?
Las principales características que debe tener un buen trípode para fotografía nocturna son las siguientes:
- Estabilidad. No se trata de hacer un autorretrato, sino que hablamos de velocidades largas y cualquier trepidación puede estropear el resultado final.
- Cabezal. Lo ideal es que sea de bola o de tres ejes, si buscas una mayor precisión.
- Patas. Mejor cuantas menos secciones porque es más estable y que se abran de forma independiente.
Si te pierdes con qué es un cabezal, una zapata, las secciones o los pies, no te pierdas esta guía completa para comprar un trípode donde podrás resolver todas tus dudas. Y aquí algunas recomendaciones de trípodes para fotografía nocturna.
Insisto. Más allá de la cámara o el objetivo, el trípode es el accesorio en el que más cuidado debes poner a la hora de comprar, donde más tiempo y dinero debes invertir.
Disparador remoto
Acabo de mencionar la importancia de la estabilidad a la hora de lograr imágenes nítidas. Puedes comprarte un trípode súper estable, con un cabezal que permita una precisión increíble, de un material super ligero y resistente, pero como le des al botón de disparo con tu dedo, todo esto no te servirá de nada. Así es, nada más que el movimiento que se produce al apretar el botón de disparo ya está provocando una trepidación que se traduce en falta de nitidez.
Esto se soluciona con un disparador remoto. Los hay por cable o inalámbricos, pero mejor para esta ocasión olvídate de los primeros. ¿Te imaginas en medio de un monte de noche trajinando con el cable del disparador remoto? Si es el que ya tienes, vale, pero si tienes que comprarlo, no lo dudes, ve a por un inalámbrico.
Otra recomendación es que cuente con intervalómetro, el cuál te servirá para fotografiar circumpolares, lluvias de estrellas, realizar time-lapses, fotografiar las fases de un eclipse de luna, etcétera.
¿Es imprescindible el disparador remoto entre tus accesorios para la fotografía nocturna? Bueno, siempre puedes tirar del disparador con retardo de 2s con el que cuentan la mayoría de las cámaras. Así que imprescindible no es, pero altamente recomendado sí. Un día vale, pero para los adictos a la noche ya deja de servir. Otra opción es disparar desde el smartphone si tu cámara cuenta con posibilidad de conexión y te bajas la aplicación adecuada que te permita hacer el disparo desde el móvil.
Si decides comprar un disparador remoto, asegúrate de que además de inalámbrico sea compatible con tu cámara. Independientemente de que sea de la misma marca o de otra.
Aquí tienes un ejemplo de disparador a distancia con temporizador para Canon, pero está disponible para otras marcas:
Flash
Este no es uno de los accesorios imprescindibles para la fotografía nocturna pero que te puede abrir muchas puertas a la creatividad, o mejor dicho, puertas, ventanas y pasadizos secretos 😉 .
Puedes hacer fotografía nocturna sin flash, por supuesto, pero si quieres lograr efectos como el de esta foto que te muestro a continuación, vas a necesitar uno o varios flash, dependiendo de hasta dónde quieras llegar con tu creatividad.
En realidad la iluminación la puedes hacer con flash o con linternas.
Linternas para fotografía nocturna
Las linternas, al igual que el flash, te pueden servir para iluminar los motivos del primer plano. Estos pueden ser desde un árbol hasta un edificio deshabitado como en la imagen de arriba, pasando por un coche abandonado. Y sirven para iluminar desde dentro o desde fuera.
Además, te valen para guiarte en la noche 😉
Linternas hay de muchos tipos e intensidades. Algunas son solo blancas, otras son de varios colores, las hay de tonalidades frías o cálidas. También las hay resistentes al agua o sumergibles, etc. Fíjate en la potencia, la distancia a la que llegan y los colores, además de si son solo de pilas o puedes cargarlas con un USB, para encontrar la que se ajuste mejor a tus necesidades (o deseos 😉 ).
Ten en cuenta también que conforme vayas incursionando en esta disciplina es probable que necesites linternas de distinta intensidad, no es lo mismo que quieras hacer un retrato nocturno en medio de un campo de lavanda con un fondo estrellado, que iluminar la montaña que tienes delante de tu circumpolar, o si quieres crear un haz de luz hacia el cielo. Todo dependerá del tipo de fotografía que quieras conseguir.
Aquí te pongo algunos ejemplos, aunque en la red encontrarás muchas más.
Frontal
La frontal es una linterna pero no es una cualquiera, sino que se trata de esas linternas que se ajustan a tu cabeza y te permiten una libertad absoluta de movimientos al dejarte las manos libres 😉 .
Las frontales sirven principalmente para poder desenvolverte en la oscuridad, manejar la cámara, ver por dónde pisas, etc. Aunque también son útiles a nivel creativo para dirigir haces de luz.
Para la linterna frontal te recomiendo que tenga posibilidad de luz roja y luz blanca. Una luz roja es menos molesta que una blanca para determinadas situaciones y, sobre todo, para quien te acompaña cuando le miras a la cara 😉 .
Te dejo con algunos ejemplos de frontal, pero al igual que antes, con las linternas, elige la potencia en función de tus necesidades, no es lo mismo que la quieras solo para tener visibilidad a que la uses también para iluminar elementos del primer plano o crear un haz de luz. Ten también en cuenta, a la hora de comprar, que algunas tienen posibilidad de recargarlas con USB o las que solo funcionan con pilas.
Además de las linternas y las frontales, también existen otras alternativas interesantes para iluminar, por ejemplo, los cubos de iluminación o antorchas LED. Sobre gustos y necesidades, ya sabes, no hay nada escrito.
Geles de colores
Se trata de uno de los accesorios creativos para fotografía nocturna más económicos. Los geles de colores se acoplan al flash o incluso a las linternas para dotar de color a la iluminación. Con ellos lograrás fotos más creativas, repletas de color y te ayudarán a transmitir el mensaje que desees.
Algunos se sujetan con gomas, otros con un sistema de velcro, aunque también he visto por ahí trabajos de bricofotografía que han adaptado tapones de botellas con un gel de color para linternas. Si se te dan bien estas cosas seguro que te apañas estupendamente.
Batería extra
Evidentemente no es algo imprescindible, pero sí recomendable. La larga exposición consume muchísima batería y si piensas pasarte varias horas fotografiando estrellas, con todo el esfuerzo que conlleva planificar, llegar hasta el lugar elegido, trasnochar y demás, sería una pena que el fracaso de la sesión se debiera a quedarte sin batería cuando es algo tan evitable, ¿verdad?
Si te parece que las baterías de la propia marca de tu cámara son demasiado caras o se escapan a tu presupuesto, no dejes de contemplar las baterías de marca blanca.
Tarjetas de memoria
Pues por el mismo motivo que la batería extra, una tarjeta de memoria de repuesto siempre es de gran ayuda y te puede sacar de un apuro. Que no te tengas que volver a casa por falta de espacio cuando es precisamente lo que menos ocupa en tu mochila.
Además de la capacidad de almacenamiento, a la hora de comprar una tarjeta, fíjate en la velocidad de lectura y de escritura.
Parasol
Si tienes el parasol del objetivo, te será útil para evitar luces parásitas y también para prevenir la humedad en la lente. También es más conveniente que cualquier filtro barato para evitar rayones o golpes en la óptica.
Mochila para fotografía nocturna
El tema mochila es muy personal, hay quien prefiere una bandolera para llevar el equipo, o quien prefiere adaptar una bolsa, etc. Lo cierto, es que en fotografía nocturna, si la cosa va más allá de una salida de prueba y le coges de verdad el gustillo, lo más recomendable es que te hagas con una mochila que sea realmente cómoda y que quepa tu equipo, y todos los accesorios, de forma ordenada. Es decir, que puedas encontrar todo en la oscuridad o semioscuridad y volver a colocarlo de nuevo. Parece una tontería, pero no lo es.
Aquí tienes algunas ideas para escoger la mochila más adecuada a tus necesidades y, a continuación, un par de recomendaciones (aunque en el enlace encontrarás muchas más):
Otros
Más allá de las necesidades fotográficas, la noche tiene sus particularidades, así que no quiero despedirme sin dejarte algunas ideas para tomar precauciones.
Y es que no se trata de que cargues con un mochilón, pero una navaja multiusos, algo de comer, agua, una bebida caliente, un calzado adecuado al terreno donde vas a moverte y el móvil bien cargado de batería, me parecen un must, cositas que no pueden faltar en tu mochila. Y para los más precavidos, pues una manta térmica tampoco es mala idea.
Lo siento me ha salido la vena de madre protectora, qué le voy a hacer 😉 . Pero es que los lectores nos importáis mucho y queremos que os cuidéis, no es malo, ¿verdad?
Ahora ya sí que me puedo despedir, si te ha resultado útil, por favor, compártelo, puede que algún futuro fotógrafo nocturno te lo agradezca eternamente.
Y si se te ocurre algo más, ya sabes, estaremos encantados de leerte en los comentarios. ¡Gracias y hasta la próxima!